Manga y obras originales
09/06/2023
Shingo Kimura, de Sasuke's Story, revela el impacto de NARUTO. “Para mí, el maestro Kishimoto es fundamental. Al imaginar que iba a encontrarme con él, se me saltaron las lágrimas (risas)” (1.ª parte de la entrevista)
El manga Naruto: Sasuke's Story–The Uchiha and the Heavenly Stardust (Naruto: La historia de Sasuke - Los Uchiha y el polvo de estrellas celestial) (en adelante, Sasuke's Story) fue serializado en Shonen Jump+ y MANGA Plus. Se trata de una historia en la que, tras la Gran Guerra Ninja, Uchiha Sasuke (en adelante, Sasuke) va a la tierra aislada, el reino Redaku, para buscar pistas sobre la enfermedad Naruto Uzumaki (en adelante, Naruto). Actualmente está a la venta el último tomo. Le pregunté al encargado de este manga, Shingo Kimura, sobre su encuentro con NARUTO. (1.ª parte de serie de 3)
Quedé impresionado por los mangas de NARUTO que había en casa de mi amigo
—Hasta antes de empezar con Sasuke's Story, ¿qué tipo de vida de artista de manga has llevado hasta hoy?
Para empezar, mi hermana mayor era muy buena con el dibujo, y cuando me dibujó la figura del Kamen Rider que yo tenía, me puse a dibujar mirando ese dibujo. Por aquel entonces tenía unos 3 o 4 años.
Después, empecé a ver el anime Fullmetal Alchemist (Square Enix), y supe entonces que el anime se basaba en un manga.
En segundo de primaria teníamos una clase donde escribíamos sobre nuestros sueños para el futuro, y yo pensé: “Quiero una profesión en la que se dibuje, pero no sé muy bien cómo poder llegar a ser dibujante”. No obstante, sentí que la figura del creador de mangas era algo cercano para mí. En realidad, no lo era, pero lo escribí. Desde entonces, fui tomando mucha consciencia sobre la profesión del creador de mangas.
—¿Cuándo entraste en contacto con NARUTO?
En tercero de primaria, en la casa de un amigo había un tomo de NARUTO, y fue entonces cuando me encontré con él por primera vez.
En los mangas que había leído hasta entonces, se usaba mucho la técnica del screentone, pero en NARUTO casi no se usaba. “Aunque está en blanco y negro, ¿de dónde viene está sensación de tridimensionalidad tan impresionante?”, pensaba de niño, quedándome maravillado.
Desde entonces empecé a reunir los tomos, y cuando era estudiante de secundaria fui comprando la revista Weekly Shonen Jump (en adelante, Jump).
Para empezar, mi hermana mayor era muy buena con el dibujo, y cuando me dibujó la figura del Kamen Rider que yo tenía, me puse a dibujar mirando ese dibujo. Por aquel entonces tenía unos 3 o 4 años.
Después, empecé a ver el anime Fullmetal Alchemist (Square Enix), y supe entonces que el anime se basaba en un manga.
En segundo de primaria teníamos una clase donde escribíamos sobre nuestros sueños para el futuro, y yo pensé: “Quiero una profesión en la que se dibuje, pero no sé muy bien cómo poder llegar a ser dibujante”. No obstante, sentí que la figura del creador de mangas era algo cercano para mí. En realidad, no lo era, pero lo escribí. Desde entonces, fui tomando mucha consciencia sobre la profesión del creador de mangas.
—¿Cuándo entraste en contacto con NARUTO?
En tercero de primaria, en la casa de un amigo había un tomo de NARUTO, y fue entonces cuando me encontré con él por primera vez.
En los mangas que había leído hasta entonces, se usaba mucho la técnica del screentone, pero en NARUTO casi no se usaba. “Aunque está en blanco y negro, ¿de dónde viene está sensación de tridimensionalidad tan impresionante?”, pensaba de niño, quedándome maravillado.
Desde entonces empecé a reunir los tomos, y cuando era estudiante de secundaria fui comprando la revista Weekly Shonen Jump (en adelante, Jump).
Todas las cosas que me gustaban estaban allí
—¿Así que el creador de mangas del que más influencia has recibido es el maestro Kishimoto?
Así es. Si tuviera que decir todo lo que hace al maestro Kishimoto impresionante no terminaría nunca. Da la sensación de que mezcla de manera increíble el atractivo de la tridimensionalidad de las revistas de manga seinen, y las partes adorables y pop de las revistas de manga shonen. Las historias también son muy interesantes, y el diseño de los personajes es fascinante.
Desde pequeño me gustaban las cosas con realismo. Tal vez a la mayoría les gustara Pokémon u otros juegos, pero a mí Pokémon no me interesaba mucho.
A mí me gustaban más los juegos de lucha como Dead or alive y Tekken, en los que hay movimientos como lanzar al enemigo por los aires para derrotarlo. Los jugaba solo para hacer eso.
En las escenas del opening y de lucha del anime de 2003 Fullmetal Alchemist, también me intrigaban los movimientos fluidos de los personajes, y de niño me preguntaba: “¿Por qué me resulta tan fascinante?”. Me gustaban tanto esas obras con realismo que recuerdo esforzarme para mover el cuerpo imitándolas.
Fue entonces que me enganché al manga de NARUTO. Fue como encontrar algo donde había todas las cosas que me gustaban. Es la sensación de que algo te encanta de forma natural.
—En la faja del primer tomo ya hay un comentario al respecto, ¿pero por qué comenzaste a comprar no solo los tomos, sino también la revista Jump?
Incluso ahora lo recuerdo. Los números 34 y 35 de 2012 tuvieron de portada a NARUTO. El número 35 estaba en la tienda de conveniencia y su portada era increíble.
Así es. Si tuviera que decir todo lo que hace al maestro Kishimoto impresionante no terminaría nunca. Da la sensación de que mezcla de manera increíble el atractivo de la tridimensionalidad de las revistas de manga seinen, y las partes adorables y pop de las revistas de manga shonen. Las historias también son muy interesantes, y el diseño de los personajes es fascinante.
Desde pequeño me gustaban las cosas con realismo. Tal vez a la mayoría les gustara Pokémon u otros juegos, pero a mí Pokémon no me interesaba mucho.
A mí me gustaban más los juegos de lucha como Dead or alive y Tekken, en los que hay movimientos como lanzar al enemigo por los aires para derrotarlo. Los jugaba solo para hacer eso.
En las escenas del opening y de lucha del anime de 2003 Fullmetal Alchemist, también me intrigaban los movimientos fluidos de los personajes, y de niño me preguntaba: “¿Por qué me resulta tan fascinante?”. Me gustaban tanto esas obras con realismo que recuerdo esforzarme para mover el cuerpo imitándolas.
Fue entonces que me enganché al manga de NARUTO. Fue como encontrar algo donde había todas las cosas que me gustaban. Es la sensación de que algo te encanta de forma natural.
—En la faja del primer tomo ya hay un comentario al respecto, ¿pero por qué comenzaste a comprar no solo los tomos, sino también la revista Jump?
Incluso ahora lo recuerdo. Los números 34 y 35 de 2012 tuvieron de portada a NARUTO. El número 35 estaba en la tienda de conveniencia y su portada era increíble.
Sin embargo, en aquella época, yo solo compraba tomos, y como había un poco de la historia adelantada (en Jump), dudé si comprarla o no... Así que di dos o tres vueltas por la tienda, y al leer por encima para ver cómo era, me fascinaron los colores de la portada y las otras páginas a color. No podía resistirme a esto, y fue así como empecé a comprar Jump.
Conocer por primera vez sobre el premio Tezuka
—¿En la Jump encontraste un encanto diferente al de los tomos?
Las páginas a color se dejaban así (en los tomos son en blanco y negro), y me impresionó lo grandes que eran.
Luego supe que había premios de manga, y que entre ellos se encontraba el premio Tezuka, de cuyo jurado formaba parte el maestro Kishimoto. Empecé a pensar cosas como “¿Si envío esto, lo leerá el maestro Kishimoto?” o “Algún día me gustaría enviar algo”.
Pero cuando era estudiante de secundaria, estaba ocupado con los clubes extraescolares y la academia, y no tenía nada de tiempo para dibujar manga. Eso me resultaba estresante, de modo que decidí que de ninguna manera entraría en un club extraescolar cuando fuera al bachillerato.
Al ir al bachillerato, volvía a casa nada más terminar las clases, y durante los días de instituto dedicaba 6 o 7 horas a copiar manga. Aparte de NARUTO también me gustaba mucho La espada del inmortal, así que los copiaba sin parar.
—6 o 7 horas en un día es increíble. ¿En ese entonces, lo que hacías era básicamente copiar?
También creaba, pero sobre todo hacía copias. El motivo por el cual me gustó La espada del inmortal también fue el maestro Kishimoto. Cuando terminó la publicación de NARUTO, los maestros Kishimoto y Hiroaki Samura tuvieron una charla sobre La espada del inmortal, y el maestro Kishimoto dijo sobre ella: “Me ha influenciado mucho. Las escenas de acción son impresionantes”.
De vuelta al instituto, inmediatamente compré los tomos 13 y 14 del manga. Cuando empecé a leerlo lo encontré muy interesante, y a la siguiente semana compré casi todo el resto de los tomos, enganchándome a partir de entonces.
Las páginas a color se dejaban así (en los tomos son en blanco y negro), y me impresionó lo grandes que eran.
Luego supe que había premios de manga, y que entre ellos se encontraba el premio Tezuka, de cuyo jurado formaba parte el maestro Kishimoto. Empecé a pensar cosas como “¿Si envío esto, lo leerá el maestro Kishimoto?” o “Algún día me gustaría enviar algo”.
Pero cuando era estudiante de secundaria, estaba ocupado con los clubes extraescolares y la academia, y no tenía nada de tiempo para dibujar manga. Eso me resultaba estresante, de modo que decidí que de ninguna manera entraría en un club extraescolar cuando fuera al bachillerato.
Al ir al bachillerato, volvía a casa nada más terminar las clases, y durante los días de instituto dedicaba 6 o 7 horas a copiar manga. Aparte de NARUTO también me gustaba mucho La espada del inmortal, así que los copiaba sin parar.
—6 o 7 horas en un día es increíble. ¿En ese entonces, lo que hacías era básicamente copiar?
También creaba, pero sobre todo hacía copias. El motivo por el cual me gustó La espada del inmortal también fue el maestro Kishimoto. Cuando terminó la publicación de NARUTO, los maestros Kishimoto y Hiroaki Samura tuvieron una charla sobre La espada del inmortal, y el maestro Kishimoto dijo sobre ella: “Me ha influenciado mucho. Las escenas de acción son impresionantes”.
De vuelta al instituto, inmediatamente compré los tomos 13 y 14 del manga. Cuando empecé a leerlo lo encontré muy interesante, y a la siguiente semana compré casi todo el resto de los tomos, enganchándome a partir de entonces.
Obtuvo el premio Tezuka con el manga que hizo para el trabajo de graduación
—Escuché que tras la graduación de bachillerato, fuiste a una escuela de arte.
Yo soy de la prefectura de Gunma, pero estudié en el Departamento de Arte y Diseño de un colegio universitario que hay en Kiryu, donde aprendí a dibujar ilustraciones y manga.
Al enviar el manga que dibujé para el trabajo de graduación, obtuve un premio. (Premio de finalista de la 95.ª edición del Premio Tezuka por el manga Kuimodoshi)
Yo soy de la prefectura de Gunma, pero estudié en el Departamento de Arte y Diseño de un colegio universitario que hay en Kiryu, donde aprendí a dibujar ilustraciones y manga.
Al enviar el manga que dibujé para el trabajo de graduación, obtuve un premio. (Premio de finalista de la 95.ª edición del Premio Tezuka por el manga Kuimodoshi)
—Parece que el maestro Kishimoto te apoyó bastante en esta selección.
Pensé: “No puede ser verdad, debo de estar soñando”. Incluso ahora recuerdo el instante en que el editor encargado me entregó ese número de la Jump. Cuando vi la página con el anuncio de ganadores en la sala de espera para cambiar el tren que regresa de Tokio, estaban escritas las palabras del profesor Kishimoto.
Hay una columna en la que los maestros del jurado escribían críticas generales sobre cómo habían decidido este premio, y no suele mencionarse una obra en especial, pero allí habían mencionado Kuimodoshi. Fue impactante.
—¿Cuándo te encontraste con el maestro Kishimoto por primera vez?
En la ceremonia de recepción del premio Tezuka. Cuando me habló por primera vez dijo: “Tus dibujos son realmente buenos”. Me sorprendí muchísimo. Como todavía no había ocurrido la pandemia de COVID-19, pude estrecharle la mano.
Puede parecer un poco inquietante, pero cuando dibujaba el manga por la noche para participar en el premio, imaginé que, si realmente lo enviaba al premio Tezuka y ganaba, podría conocer al maestro Kishimoto, y al hacerlo se me saltaban las lágrimas. Pero cuando lo conocí de verdad no lloré. Me da miedo el poder imaginativo del yo de aquel entonces (risas).
La contraseña de la pantalla de bloqueo de mi smartphone está hecha en base a la fecha en que conocí al maestro Kishimoto.
—¿Puedes contarnos eso? (risas).
No hay problema. Toda mi identidad viene del maestro Kishimoto. También me encantan AKIRA, La espada del inmortal, The Ghost in the Shell de Production I.D, y Jin-Roh: La brigada del lobo. Realmente el maestro Kishimoto es fundamental para mí.
Lee la 2.ª parte aquí
Lee la 3.ª parte aquí
Shingo Kimura
Creador de mangas
Nacido en la prefectura de Gunma. Graduado de la Universidad Kiryu en el Departamento de Arte y Diseño. Finalista de la 95.ª edición del premio Tezuka. Hizo su debut con el manga one-shot Kuimodoshi, que apareció en la edición de septiembre de 2018 de la revista Jump SQ.
Desde el 2022, es el encargado del manga Naruto: Sasuke's Story–The Uchiha and the Heavenly Stardust (Naruto: La historia de Sasuke - Los Uchiha y el polvo de estrellas celestial) de la revista Shonen Jump+ y MANGA Plus (obra original de Masashi Kishimoto y Jun Esaka (JUMP j BOOKS)).
Realización de entrevista y redacción: Asami Sato
Pensé: “No puede ser verdad, debo de estar soñando”. Incluso ahora recuerdo el instante en que el editor encargado me entregó ese número de la Jump. Cuando vi la página con el anuncio de ganadores en la sala de espera para cambiar el tren que regresa de Tokio, estaban escritas las palabras del profesor Kishimoto.
Hay una columna en la que los maestros del jurado escribían críticas generales sobre cómo habían decidido este premio, y no suele mencionarse una obra en especial, pero allí habían mencionado Kuimodoshi. Fue impactante.
—¿Cuándo te encontraste con el maestro Kishimoto por primera vez?
En la ceremonia de recepción del premio Tezuka. Cuando me habló por primera vez dijo: “Tus dibujos son realmente buenos”. Me sorprendí muchísimo. Como todavía no había ocurrido la pandemia de COVID-19, pude estrecharle la mano.
Puede parecer un poco inquietante, pero cuando dibujaba el manga por la noche para participar en el premio, imaginé que, si realmente lo enviaba al premio Tezuka y ganaba, podría conocer al maestro Kishimoto, y al hacerlo se me saltaban las lágrimas. Pero cuando lo conocí de verdad no lloré. Me da miedo el poder imaginativo del yo de aquel entonces (risas).
La contraseña de la pantalla de bloqueo de mi smartphone está hecha en base a la fecha en que conocí al maestro Kishimoto.
—¿Puedes contarnos eso? (risas).
No hay problema. Toda mi identidad viene del maestro Kishimoto. También me encantan AKIRA, La espada del inmortal, The Ghost in the Shell de Production I.D, y Jin-Roh: La brigada del lobo. Realmente el maestro Kishimoto es fundamental para mí.
Lee la 2.ª parte aquí
Lee la 3.ª parte aquí
Shingo Kimura
Creador de mangas
Nacido en la prefectura de Gunma. Graduado de la Universidad Kiryu en el Departamento de Arte y Diseño. Finalista de la 95.ª edición del premio Tezuka. Hizo su debut con el manga one-shot Kuimodoshi, que apareció en la edición de septiembre de 2018 de la revista Jump SQ.
Desde el 2022, es el encargado del manga Naruto: Sasuke's Story–The Uchiha and the Heavenly Stardust (Naruto: La historia de Sasuke - Los Uchiha y el polvo de estrellas celestial) de la revista Shonen Jump+ y MANGA Plus (obra original de Masashi Kishimoto y Jun Esaka (JUMP j BOOKS)).
Realización de entrevista y redacción: Asami Sato